Secar y curar tus cogollos como un pro

La espera y el tiempo invertido durante semanas solo valdrán la pena si secas bien la marihuana antes de empezar el proceso de curado para poder degustar de las mejores propiedades de tu variedad cultivada.

Antes de secar los cogollos de marihuana debes manicurarlos, este proceso de limpieza debe hacerse de manera que todos los cogollos tengan un tamaño similar para facilitar un secado homogéneo que evite excesos de humedad o que cogollos más grandes pasen su humedad a los más pequeños.

Los cogollos centrales se abren y se separan en cogollos medianos cortando los tallos pequeños que los unen a la rama principal. A la hora de manicurar se deben separar las hojas más grandes (que casi no contienen resina) de las hojas pequeñas y medianas que se encuentran entre los cogollos (ricas en resina). Las hojas grandes se desechan porque contienen mucha clorofila y poca resina.

Se recomienda el uso de tijeras podadoras de calidad para facilitar la labor de la manicura, éstas se pueden limpiar con alcohol al final de la manicura para recoger los restos de resina de las hojas. Lo recogido se deja secar antes de su consumo para evitar consumir el alcohol.

Tipos de secado

El secado con mallas se recomienda para producciones grandes, para esto contamos con una gran variedad de mallas de buena calidad que cuentan con varios niveles de secado para permitir la aireación de los cogollos y evitar que se toquen entre sí.

También se puede dedicar uno o más niveles para el material destinado a la extracción de resina, como hojas o cogollos poco desarrollados.

El tendido con cuerdas es otro método para secar tus cogollos de marihuana que se basa en cortar las ramas de la planta y colgarlas cabeza abajo sin que se toquen entre ellas para evitar la aparición de hongos debido a la humedad de los cogollos.

Es necesario que se haga en un lugar aireado y oscuro, procurar el mayor contacto posible con el aire, sin que este sea demasiado fuerte.

Temperatura y humedad

La humedad relativa aconsejada para el secado es de 30 a 40%, este nivel permite que los cogollos se sequen en unos 10 días, luego de este tiempo estarán listos para el curado.

Para controlar los niveles de humedad se recomienda el uso de un deshumidificador con depósito para reducir los excesos. Otra herramienta útil para evitar las bolsas de humedad es un ventilador situado en una esquina de la habitación con un flujo indirecto hacia los cogollos, de manera que remueva la humedad pero no sacuda las ramas.

En cuanto a la temperatura hay mucho en juego, el aroma y el sabor del cannabis se debe en buena parte a las moléculas llamadas “terpenos”, son compuestos volátiles que se pierden por acción del calor, por lo se debe evitar secar a más de 25º C.

Si logras tener una buena circulación de aire solo necesitas controlar la temperatura y humedad para sacar el máximo a tu cosecha, para esto es recomendable utilizar un termohigrómetro digital que te permita configurar el ambiente perfecto.

Cómo curar tus cogollos de marihuana

La mejor forma de curar tus cogollos es usando contenedores de vidrio que cierren herméticamente, perfectamente cerrados para evitar el intercambio con el aire exterior. Estos contenedores propician que la humedad de la materia vegetal se homogenice y que la transformación de los cannabinoides sea uniforme.

Una vez envasada, la hierba debe ser protegida de los cambios de temperatura y de la exposición a la luz solar directa.

Durante las dos primeras semanas del curado debes abrir el contenedor de vidiro una vez por día durante unos segundos para renovar su aire y liberar la humedad, si al tocar los cogollos los sientes muy húmedos debes dejar la tapa abierta por un par de minutos más.

Luego de dos semanas, una vez los cogollos presentan cada vez menos humedad puedes abrir el contenedor una vez a la semana por unos segundos.

Algunos cultivadores curan su marihuana por 1 o 2 semanas, mientras otros curan sus cogollos por 30 días más. Se conoce que al cabo de 30 días los cogollos presentas buenas características y es ideal su consumo.

El tiempo de curado puede variar, conociéndose de cultivadores que los curan por meses, pero también se ha comprobado que luego de 6 meses de curado los cogollos pierden potencia porque el THC se va convirtiendo en Cannabinoides a través del tiempo.