El auge del cultivo de marihuana autofloreciente

El cultivo de marihuana autofloreciente está cada día más en ascenso. Son muchas las personas que las prefieren por su facilidad de cultivo, tamaño y rapidez a la hora de decidir cómo será su cultivo de marihuana autofloreciente para la temporada de exterior.

Esto, sin dejar de lado a las plantas de marihuana regulares o feminizadas, que servirán para cultivos indoor y exterior.

cultivo de marihuana autofloreciente

Cómo hacer un cultivo de marihuana autoflorecientes

En este artículo, La Juana Growshop y sus expertos nos enseñan el mejor modo para realizar un cultivo de marihuana autofloreciente en pos de obtener la mejor calidad y cosecha. Para este cultivo se emplearon semillas en macetas de 18 y 11Lts. de capacidad.

Es importante preocuparse que en la primera fase de vida de las plantas no sufran una sobre fertilización o un exceso de riego ya que puede echar a perder todo el cultivo de marihuana autofloreciente. Este tipo de stress podría afectar su periodo de crecimiento al no desarrollarse tanto como realmente deberían haberlo hecho.

Entonces, el primer paso será plantar las semillas en un disco germinador o Jiffy, como se conocen más popularmente. Una vez germinadas y crecidas la trasplantamos a la maceta definitiva de 18Lts. de capacidad especial para cultivo de marihuana autofloreciente, ya que la planta tiende a ser  más alta que ancha.

Las plantas de cannabis automáticas tienen un crecimiento limitado porque tienen el gen autofloreciente que las hace florecer cuando han adquirido la madurez como vegetal.

Este gen se activa según la cantidad utilizado para el cultivo de marihuana autofloreciente y cómo esté dispuesto para las plantas.

Esto es muy importante en un cultivo de marihuana autofloreciente!

En el caso de un cultivo de marihuana autofloreciente, cuando la raíz de la planta detecta el tope de la maceta o suelo, se pone a florecer. Cuanto más tiempo tarde la raíz de la planta a llegar al final de la maceta, mayor tamaño final de planta y mayor producción obtendremos.

Al inicio del periodo de crecimiento, cuando las plantas son aún pequeñas, se hace un riego con muy poca cantidad de agua de no más de 330ml por maceta y planta junto con una solución nutriente.

En la primera semana de floración, se empiezan a observar con facilidad las primeras flores en las puntas de las ramas. Conforme van pasando las semanas, también iremos aumentando la cantidad en la dosificación de los abonos para que tengan suficiente elementos nutritivos como para que no sufran ningún estrés provocado por una carencia o un exceso de nutrientes.

Durante la séptima y última semana de floración de nuestro cultivo de marihuana autofloreciente, se podrá apreciar cómo los cogollos están ya bien maduros con harto aroma y color. Otra señal clara de que ya hay que cosechar es el hecho de que en gran parte de las plantas coinciden los colores de los estigmas de los cogollos, los cuales se han vuelto de color marrón/naranja mostrando signos de madurez. Comprobamos nuevamente los tricomas con lupas para proceder a cosechar nuestro cultivo de marihuana autofloreciente.

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