Maximiza la producción de marihuana en exterior

Cultivo de marihuana en exterior para la máxima producción

El cultivo de marihuana en exterior es sin duda el más recurrente en los países que gozan de una climatología adecuada para su cultivo.

Son muchos los consumidores que dependen de un buen cultivo de exterior para tener las reservas llenas de cogollos durante todo el año, y de este modo ser un consumidor autosuficiente.

Este post lo dedicaremos a mejorar la producción de las plantas en el cultivo de exterior. A veces se hace complicado poder sacar más rendimiento a las plantas, pero siempre hay trucos que nos ayudan a alcanzar este objetivo, maximizar la producción en exterior.

En exterior, básicamente se cultiva de dos modos, o mediante maceta o en cultivo en pleno suelo. Muchos de los trucos y explicaciones que daremos durante el post sirven para ambos tipos de cultivo. Vayamos paso a paso.

Antes de empezar con la selección de semillas a cultivar debemos tener claro dónde cultivar las plantas y conocer al máximo el entorno, tanto a nivel climático como la tipología del sustrato donde se vaya a cultivar.

La importancia del clima y el entorno de cultivo

La climatología del lugar donde se vaya a cultivar es muy importante ya que nos marca el tipo de genética que debemos usar para que todo sea mucho más sencillo. Por ejemplo, si vivimos en un lugar dónde las lluvias están muy presentes, seleccionaremos unas cepas de cannabis que sean resistentes a las altas humedades.

En caso de que las lluvias estén presentes según época del año, por ejemplo al inicio del otoño entonces podemos seleccionar genéticas que se puedan cosechar antes de que las lluvias hagan acto de presencia. Para estos lugares se han creado genéticas que se cosechan unas semanas antes de tiempo y con las cuales, dependiendo de la región dónde uno se encuentre, se puede evitar la temporada de lluvias de modo que ya nos olvidamos de los problemas derivados de ella como pueden ser los hongos tipo botrytis, phytium, oidio, etc.

La exposición solar y las plantas de marihuana

Otro apartado muy importante en el cultivo de cannabis en exterior es sin duda la exposición solar que van a tener las plantas. El sol es el motor principal de todo vegetal y animal, sin él nada prospera. Por esta misma regla, cuantas más horas de sol directo aprovechables para las plantas, más sanas, mejor estructura y más producción puede llegar a tener, comparando siempre dos genéticas iguales, en formato de esqueje.

Si en el espacio de cultivo, en el exterior, hay diferentes rincones con varias exposiciones solares, trataremos siempre de poner las plantas dónde haya una mayor cantidad de horas de sol.

Al poner la planta en un lugar más soleado, se evita un exceso de posibles humedades, en otoño, controlando mucho mejor la posible aparición de posteriores hongos en las plantas. Y si de pasada este rincón de cultivo está bien ventilado, el lugar se convierte en un rincón excepcional para el cultivo de marihuana en exterior consiguiendo enormes producciones.

Con el cultivo de cannabis en maceta no hay problema ya que las plantas pueden moverse fácilmente e ir en busca de sol, pero si las plantamos en pleno suelo, antes hay que asegurarse al 100% de hallar el mejor lugar para su cultivo.

¿Cuándo empezar con el cultivo en exterior?

Esta es sin duda una pregunta muy usual que puede tener diferentes respuestas. En este caso, como buscamos la máxima producción de una planta a partir de semilla, la respuesta es; ¡cuanto antes mejor!

En España tenemos cuatro estaciones bien marcadas en un año y usamos tres de ellas para el cultivo de cannabis en exterior y máxima producción: primavera, verano y otoño.

La germinación de las semillas, en exterior se realiza durante la primavera, periodo en el que las plantas crecen más porque las horas de sol van en aumento hasta que llega el solsticio de verano, momento en que las horas de sol empiezan a bajar. Este periodo de crecimiento está limitado a unos meses, tras este tiempo las plantas se pondrán a florecer en verano para ser cosechadas durante el otoño, hablamos siempre de plantas fotodependientes o sea, plantas no automáticas, ya sean semillas regulares o feminizadas.

Podemos pues avanzarnos al periodo de crecimiento de exterior, empezando a realizar el crecimiento en interior, adaptando el fotoperiodo de interior a las horas de sol que habrá en exterior, en el momento en que se vayan a sacar las plantas al exterior. Para una información más completa, podéis ver el post sobre el momento ideal para sacar plantas de marihuana al exterior.

Horario solar según país y hemisferio:

Tal y como podemos ver en el gráfico, observamos que el hemisferio norte y el sur tienen el horario solar invertido, es decir, cuando en España es invierno en Argentina o Chile es verano y viceversa. Por el contrario podemos ver como en el trópico y ecuador las horas de sol son siempre constantes con unas 12h aproximadas de sol diarias.

Así que no es lo mismo cultivar en el hemisferio norte o sur que en los trópicos o en el ecuador ya que en el norte y sur las plantas tendrán tiempo de crecer durante meses, pero en el ecuador o trópicos no.

Esto es así porque el número de horas de sol que hay en los trópicos y ecuador siempre son 12h de modo que cuando las plantas de cannabis ya han alcanzado su madurez, se ponen a florecer con un tamaño más reducido en comparación al hemisferio sur y norte, en el cual disponen de hasta 16h al día de sol.

El sustrato en el cultivo de marihuana

Otro punto importante a tener en cuenta es sin duda el sustrato a usar en el cultivo. Si la tierra de la que disponemos no es adecuada, pueden surgir muchos problemas durante el cultivo y estos son muy difíciles de solucionar a posteriori. Esto puede ocurrir tanto en interior como en exterior ya sea en pleno suelo o maceta.

Así pues debemos mirar siempre la composición de la tierra del terreno donde se vaya a cultivar. Si la tierra es muy arcillosa, impermeable, compacta, se hace fango o comprime las raíces solo acarreará problemas con el sistema radicular. Si el sustrato que disponemos no es esponjoso deberemos aportarlo nosotros, ya que si la planta no tiene una buena base, todo irá mal.

La composición del sustrato puede hacerse de muchos modos diferentes, lo realmente importante es que la tierra que vayamos a usar para las plantas sea muy esponjosa, cuando más mejor, ya que las raíces crecen más rápido y la parte aérea de la planta también.

Composición de sustrato adecuada para el cultivo de marihuana:

  • Mezcla de diferentes turbas (rubia, negra y de jardín)
  • Humus de lombriz
  • Coco
  • Perlita

Cuando se está realizando la mezcla de tierras podemos optar por abonar el sustrato con abonos de lenta liberación para marihuanay varios aditivos, para que a la planta no le falte de nada desde un inicio en su crecimiento.

Existen diferentes marcas de abonos especializadas en nutrientes de lenta liberación que funcionan muy bien y son muy completos e ideales para cualquier etapa de la vida de la planta.

  • Terralba
  • Aptus
  • Og Tea
  • Guanokalong
  • Bio Tabs

Todos estos abonos se pueden usar sin problemas mezclados en tierra usando las dosis recomendadas por parte de los fabricantes.

¿Cultivo de marihuana en pleno suelo o en maceta?

Esta es una pregunta que a veces es muy fácil de responder y otras veces no. Lo que está claro es que si no disponemos de un pequeño jardín o terreno y solo disponemos de una terraza o balcón, no nos queda otra que cultivar en maceta.

Para la máxima producción en exterior recomendaremos el cultivo en pleno suelo, aunque usando macetas muy grandes también es muy factible sacar grandes producciones.

La producción de una planta, a parte de la genética y abonos usados en el cultivo, dependerá de su tamaño y forma. Una planta muy alta pero con poca ramificación no servirá de nada ya que su producción será bastante baja en comparación a una planta que ha sido podada cuando se debía hacer. Así que se debe saber cuándo podar una planta para que esta pueda mejorar su estructura en caso de ser necesario.

Cultivo para la máxima producción en exterior

Bien, una vez hemos tenido en cuenta la genética a cultivar, el sustrato, el mejor emplazamiento, los abonos a usar, y todo lo comentado anteriormente procedemos a ver cómo realizar el cultivo mes a mes desde la entrada de la primavera, que es cuando iniciaremos el cultivo con la germinación de las semillas, hasta el final del cultivo.

Inicio del cultivo en exterior, España Marzo:

El mes de marzo es un mes un poco especial ya que es el transitorio entre el invierno y la primavera, de modo que dependiendo de la situación geográfica donde se cultive, norte o sur de España, puede variar mucho pues en el sur siempre gozan de unas temperaturas más suaves que en el norte.

Empezamos con la germinación de las semillas, hay que tener cuidado con las temperaturas de germinación y procurar que siempre esté entre los 20 y los 24º para que la ratio de germinación sea la mayor posible, sino siempre puede haber semillas que no germinen.

Una vez las tenemos germinadas y en su primera, y pequeña maceta de no más de 1L, las podemos poner al exterior pero antes hay que asegurar que las temperaturas lo permitan. En el caso de que haya un mínimo de 16º, o más, ya las podemos dejar durante el día al exterior pero si las temperaturas externas son inferiores a los 14º mejor las aguantamos un tiempo dentro de casa delante de la ventana que tenga más sol directo hasta que se hagan un poco más robustas.

También se puede optar por crear un pequeño invernadero con unas botellas de plástico. A la botella se corta por un lado, por la parte baja, y se les hace unos agujeros para que respire bien. Se pone la botella encima de la planta y se hunde un poco en el sustrato para que se mantenga fija en caso de que haga un poco de viento.

Esto permite un crecimiento mucho más rápido en los primeros estadios de vida de la planta. Ayuda a mantener una humedad alta en el ambiente lo que hace que la planta se desarrolle con más velocidad y no se estrese por falta de humedad. Aguantaremos la planta en la misma maceta durante el mes de marzo.

Usaremos aquellos productos que nos ayuden a mejorar el crecimiento de las plantas de marihuana como pueden ser los estimuladores de raíz y la micro vida bacteriana. Así también empezamos a proteger las raíces desde el primer día evitando la aparición de posibles hongos dañinos para las plantas tipo phytium o fusarium.

Si usamos una tierra rica en abono, no será necesario aportar alimento en formato líquido, por lo menos durante un mes y medio. Si de lo contrario usamos una tierra light optaremos entonces por aportar abono líquido pero en poca cantidad un riego si y dos no, siempre en cantidades muy limitadas de agua para evitar que el sustrato quede húmedo durante días, pues siempre es mejor regar 3 veces por semana que sólo 1.

Mes de Abril, periodo de lluvias:

El mes de abril, lluvias mil, es un mes muy lluvioso pero las temperaturas ya son un poco más suaves y los días se van alargando poco a poco y el sol va lentamente poniéndose más perpendicular a la tierra con lo que también llega con más fuerza.

Durante el mes pasado, marzo, la planta ha estado creando raíces para poder crecer con fuerza. Ahora la planta ya tiene un sistema radicular fuerte y se la puede trasplantar a una maceta de mayor capacidad o directamente a pleno suelo. Podemos escoger, según necesidad, entre la maceta de 7 o 11L la cual será la última a usar antes de poner la planta en pleno suelo o una maceta de un mínimo de 50/60L.

Como en Abril aún sigue haciendo frío, según situación geográfica, lo ideal es seguir con el invernadero. Ahora la planta ya ha crecido bastante, aún es pequeña con tamaño de unos 15 a 30cm (según variedad). Ahora se puede usar la maceta de 11L y con ella usamos el mismo sistema, pero ahora sí, más trabajado con el mini invernadero para macetas de 11L que hará la misma función de mini invernadero. Con este sistema se puede regular la entrada de aire para mantener el grado de humedad óptimo según la meteorología que haya en el exterior.

Dejamos que la planta pase el mes de abril en la maceta de 11L para que vaya conquistando el sustrato e incremente en gran medida la masa radicular, un paso muy importante si se quieren realizar plantas realmente productivas.

Mayo, plantar en pleno suelo o en maceta grande

Durante los dos meses pasados la planta ha crecido poco a poco y muy lentamente. Esto es debido a que las condiciones de cultivo no eran las mejores del año y el frío y la lluvia tenían mucha presencia. Ahora, en Mayo, las horas de sol van claramente en aumento y la temperatura exterior se ha suavizado mucho en toda la península, excepto algunos rincones en el norte. Es momento de plantar las plantas en el suelo o en maceta grande.

Llega el momento de trabajar duro, y como decían los mineros, a pico y pala realizaremos un agujero grande y hondo. El tamaño dependerá un poco del sustrato madre que tengamos en el huerto, campo o jardín. Si es un sustrato muy poco adecuado para el cultivo el agujero deberá ser mucho más grande que si contamos desde un inicio con un sustrato esponjoso.

Realizar un agujero permite rellenar el hueco cavado con sustrato nuevo y de calidad comprado y mezclado por nosotros como hemos comentado al inicio del post. Esta acción comporta que las plantas tengan el mejor sustrato posible para crecer, florecer y tener las raíces más protegidas que en el caso de usar un sustrato duro y opresivo.

El agujero debe ser proporcional al tamaño de plana que se quiera realizar, pero para poner un dato genérico diremos que mínimo hay que hacer un agujero dónde quepan unos 100L o más.

Cuando la planta haya conquistado todo el sustrato nuevo, aún podrá seguir creciendo, extendiendo sus capilares en la tierra del campo o jardín donde esté planada.

Una vez el agujero está realizado y se ha depositado el sustrato creado por uno mismo, se procede a plantar la planta. Veremos que la planta, en la maceta de 11L (o en una maceta de menor capacidad) ya está llena de raíces lo que ayudará mucho en el posterior crecimiento. Ahora al tener un buen sistema radicular la planta despegará en poco tiempo, tras acostumbrarse al nuevo y ya fijo emplazamiento de cultivo.

Si se puede, se aconseja usar trichodermas para cannabis o micro vida en este trasplante para que todo vaya rodado y la planta extienda sus raíces aún más rápido, aparte también se sigue aportando el estimulador de raíz. El abono, lo aportaremos si usamos tierra light, si es all mix, o sea con abono, no hará falta a no ser que veamos que la planta empieza a crear clorosis en las hojas más bajas de la planta.

Al final del mes de mayo se pueden tener unas plantas de un tamaño medio de unos 50 a 100cm (o más dependiendo de la genética y la estructura de la planta) de altura con unas buenas ramificaciones laterales que poco a poco van ensanchando la planta.

Junio, el mes que más crecen las planas

El mes de Junio es cuando las horas de sol son máximas hasta el día 21 en que se da el solsticio de verano, tras el poco a poco las horas de luz irán decreciendo. Este mes, las plantas crecerán mucho duplicando tranquilamente su tamaño del mes anterior, pues la temperatura de la tierra es ideal para la expansión radicular en la que la planta acabará por conquistar la totalidad del sustrato.

Ahora se puede pensar en las podas, si no tenemos problemas de altura se puede tranquilamente optar por no podar nada, de lo contrario si hay problemas de altura o no queremos plantas que superen los 3 o 4 metros deberemos podar el ápice central dejando que el resto de ramas por donde se ha cortado sigan creciendo.

Se puede ir repitiendo estas podas de manera continuada hasta bien entrado el mes de julio en el que las plantas ya captarán el cambio de horas de luz pero irán lentas y tardarán a ponerse a florecer, pues no empezarán a sacar flores hasta bien entrado el mes de agosto.


Al realiza tales podas, las auxinas que son las hormonas del crecimiento se reparten por toda la planta haciendo que los brazos laterales de las plantas crezcan casi hasta la altura de las puntas. Con ello conseguimos gran multitud de brotes que aportan muchos y grandes cogollos.

En Julio, cambio de fotoperiodo

Este es un mes clave en el cultivo de cannabis, pues las plantas aún siguen creciendo pero ya están cambiando su metabolismopara encararlo al fotoperiodo de floración. Durante éste mes podremos ver como la planta tiene un crecimiento muy vigoroso comparándolo con el resto de meses del periodo vegetativo.

Este crecimiento tan disparado es el periodo de streching del cannabis en exterior. En interior el streching lo podemos detectar bien ya que se da cuando realizamos el cambio de horas de luz de 18/6 a 12/12h. En exterior como no hay un reloj que podamos manipular las plantas captan el cambio más lentamente con lo que la duración del streching también es mayor, tranquilamente puede durar un mes, o más, en una planta híbrida al 50/50 ente indica/sativa.

En este punto del cultivo de exterior, se ve fácilmente como las plantas crean más cantidad de ramificaciones por todos lados, donde antes parecía que habían huecos ahora apenas pasa la luz entre la planta, pues ha creado mucha rama y hoja nueva, preparándose para empezar a crear los primeros cogollos.

A nivel de la fertilización de las plantas, en este mes reclamarán un poco más de nitrógeno, el cual la planta lo usará para crear todas las nuevas ramificaciones y hojas que ayudarán durante la floración a crear unos grandes y hermosos cogollos.

Si no le damos el aporte de nitrógeno que esperan, empezará la clorosis o carencia de nitrógeno en la parte baja de la planta y se arrastrará esta carencia durante toda la floración lo que no es muy recomendable para poder sacar la máxima producción de una planta en el exterior.

Agosto, empieza la floración en exterior:

Tras el largo periodo de stretching de más de 1 mes, ahora se podrán empezar a ver las primeras flores, debemos pues cambiar también los abonos a usar durante la floración.
Es posible que al inicio del mes de agosto, las plantas aún sigan creciendo y dependiendo de cada genética, las plantas pueden empezar a florecer antes o después. Las primeras flores se podrán ver más o menos al final de la primera quincena de agosto.

En este momento del cultivo hay que aportar el abono de floración procurando que las necesidades nutricionales de las plantas queden totalmente cubiertas y puedan empezar con fuerza a crear cogollos.

Los niveles de nutrientes a aportar durante esta etapa de floración irán incrementando lentamente hasta que la planta llegue a su punto máximo de absorción de nutrientes que se da en la semana 6 de floración en una planta de 8 semanas.

En este punto del cutlivo se pueden podar aquellas partes de la planta que quedan más cerca del tallo. Al podar las pequeñas ramas que surgen de las grandes ramas laterales, lo que se está procurando es que cuando la planta empiece a cogollar las flores se concentren en las puntas haciendo cogollos más grandes. Tras realizar esta poda el tallo queda más aireado evitando en gran medida que pueda surgir el hongo phytium y con el la podredumbre del tallo con la cosecuente muerte de la planta.

¿Cómo saber en qué semana de floración se encuentran las plantas?

Es una pregunta que parece sencilla pero que puede acarrear dudas, vamos a aclarar este punto. Sabemos cuándo se debe cosechar la planta, más o menos, según la información aportada por del banco de semillas, pero no sabemos cuándo se pone realmente a florecer.

Para tener una información veraz y correcta podemos restar el número de semanas de floración que la planta requiere a la fecha de cosecha, es decir; si tenemos una indica de 8 semanas de floración la cual se cosecha en exterior en la segunda semana de octubre, entonces restamos 8 semanas teniendo como referencia el 15 de octubre. Entonces la cuenta sería la siguiente:

La cosecha se da el 15 de Octubre, aquí la planta ya ha gastado las 2 semanas de Octubre, éstas dos las restamos y nos da el 1º octubre. Seguimos restando las 6 semanas restantes que quedan, desde el día 1 de octubre, y el resultado nos da que la floración empieza el 15 de agosto, más o menos lo que ya habíamos comentado, pero ahora lo sabemos del cierto.

Con este dato es mucho más sencillo saber hasta cuando hay que aportar abono de floración, y en qué cantidades, sin pasarnos para que las plantas queden libres de ellos al final de su cosecha.

Setiembre, las plantas a media floración

Entramos en el mes de setiembre y ahora las plantas llevan 2 semanas de floración, momento en el que empieza la aparición de las flores. Ahora y en este punto podemos alimentar las plantas como si se tratara de un cultivo de interior usando las mismas tablas de cultivo para obtener la máxima producción de cogollos.

En este punto del cultivo empezamos con el abono de floración, los estimuladores para la floración y los potenciadores de cogollos como el PK, preferiblemente en formato orgánico.

Tabla de cultivo para las plantas en exterior


En el mes de setiembre también pueden empezar a aparecer las temidas orugas en las plantas, seguramente lo hagan cuando los cogollos están más adelantados, sobre la 4 o 5 semana de floración. Si aparecen antes de tiempo, casi mejor ya que será más sencillo visualizarlas i quitarlas o realizar las aplicaciones de Bacilus Turingensis también conocido como Bio Thur o ahora llamado Trabe Cordalene. Este producto junto con el Spruzit de Neudorff son  de los pocos productos bio que se pueden usar para erradicar la plaga y aún así es necesario realizar una posterior inspección para asegurar que la plaga ha desaparecido.

Con el ataque de las orugas pueden aparecer otros problemas como es el hongo de la botrytis el cual a partir de las defecaciones de las orugas y de su fermentación aparece el hongo y se instaura en la planta y poco a poco la va colonizando y destrozando los cogollos y planta hasta que no se toman medidas de control usando fungicidas. Por este motivo siempre es mejor empezar con la prevención del hongo cuando vemos que hay posibilidad de infección. Para ello podemos usar productos como el propolix que mantendrá los hongos a ralla evitando que puedan fijarse en las hojas y tallos de las plantas.

En este mes de setiembre también hay que tener en cuenta las posibles lluvias. Dependiendo de la región geográfica donde uno cultive puede llover más, menos o no llover. En caso de cultivar en Galicia, o regiones similares, donde las lluvias están casi siempre presentes en esta época del año, los cultivadores de exterior pueden tratar de realizar una estructura que cubra las plantas mediante plásticos de invernadero que permiten evitar que la planta se moje, reduciendo mucho la posibilidad de aparición de hongos y aparte dejará respirar la planta. Se puede realizar una estructura sencilla pero eficaz con un presupuesto muy bajo pero que dará grandes resultados.

La demanada de nutrientes de las plantas ahora es máxima y es cuando hay que aportar la máxima cantidad de abono a las plantas, sobre todo de PK. En este caso y como se está realizando un cultivo totalmente orgánico recomendaremos el PK de B.A.C. para que los collos tengan el mejor sabor posible y poder disfrutar de la mejor carga terpénica de la planta.

Octubre, se acerca la cosecha

Octubre es el mes de la cosecha, en este mes se procura que la planta acabe de madurar sus cogollos y tricomas, pero también se intenta que la planta vaya perdiendo todo el exceso de posibles nutrientes que pueden quedar en su metabolismo. Realizando este proceso se consigue cosechar la mejor calidad de hierba posible.


En este punto del cultivo de exterior, a dos semanas de la cosecha, dejamos de aportar abono de floración y dejamos que las plantas se vuelvan totalmente amarillas así uno se asegura de que ya están limpias de nutrientes.

Las lluvias en este momento del cultivo pueden estar presentes y con fuerza dependiendo donde uno se encuentre. No está de más cubrir las plantas en caso de lluvia con plásticos que eviten que el agua se deposite en los cogollos. Si esto no es posible y vemos que queda poco para la cosecha y que el día seleccionado en el calendario para cosechar las plantas va a llover es mejor adelantar unos días la cosecha, así evitaremos los hongos.

Estas últimas semanas de floración se pueden realizar el lavado de raíz para ayudar a la planta a evacuar los nutrientes que están retenidos en el sustrato para dejarlo limpio y sin restos de abono y así de este modo facilitar a la planta que pueda evacuar sus nutrientes residuales que yacen en sus hojas al sustrato a través de sus raíces debido a la descompensación de niveles de Ec entre planta y sustrato.

Antes de acabar, queremos dar las gracias al compañero Adokush del foro Cannabiscafe por cedernos las fotos del cultivo en exterior, sin duda un gran cultivador y mejor compañero!